En el Capitolio de Washington DC, tres senadores estadounidenses presentaron un proyecto de ley que forzaría al Congreso a votar por primera vez acerca de continuar con el apoyo de Estados Unidos a la guerra de la coalición liderada por Arabia Saudí en Yemen. La medida fue presentada por el republicano Mike Lee, el demócrata Chris Murphy y el senador independiente de Vermont Bernie Sanders, quien señaló que la Constitución otorga al Congreso –y no al presidente– la potestad de declarar la guerra. Sanders sostiene que Estados Unidos está contribuyendo con una catástrofe humanitaria en Yemen.
Bernie Sanders afirmó: “El coordinador de ayuda de emergencia de [la Organización de las] Naciones Unidas declaró que Yemen estaba al borde de, cito, ‘la mayor hambruna que ha visto el mundo en varias décadas’. Hasta el momento, al menos 10.000 civiles han muerto y más de 40.000 resultaron heridos en la guerra, y tres millones de personas han sido desplazadas. Muchos estadounidenses tampoco son conscientes de que las fuerzas de Estados Unidos han participado activamente al apoyar a los saudíes en esta guerra brindando inteligencia y reabastecimiento aéreo para los aviones, cuyas bombas han matado a miles de personas e hicieron que esta crisis empeorara enormemente”.
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