En el estado de Pensilvania, nuevos datos revelados por el Servicio Postal estadounidense indican que la entrega a tiempo del correo ha colapsado en las últimas dos semanas, en momentos en que el estado observa un número récord de votos emitidos por correo. En la ciudad de Filadelfia, alrededor del 42 % del correo de primera clase tardó cinco días o más en llegar a su destino, en comparación con una cifra de solo el 13 % en el mes de enero. Mientras tanto, funcionarios electorales del condado de Butler, en el estado de Pensilvania, argumentan que miles de boletas solicitadas por los votantes para emitir su voto por correo parecen haberse perdido.
En el estado de Minesota, un tribunal federal ordenó a los funcionarios electorales que aparten las boletas de voto por correo recibidas después del 3 de noviembre, lo que prepara el terreno para la invalidación de las boletas, incluso si llevan el sello de envío por correo con fecha del día de las elecciones o anterior. El fallo revoca una orden del secretario de Estado de Minesota, que exigía que se cuenten las boletas recibidas dentro de los siete días posteriores a las elecciones.
En el estado de Michigan, un tribunal estatal de apelaciones confirmó el jueves una orden que permite que se porten armas de fuego de manera visible en los centros de votación. El fallo anula una orden de la fiscal general de Michigan que prohibía la exhibición de armas en un área de 30 metros alrededor de los centros de votación.
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