Venezuela ha informado que ha detenido a dos exsoldados de las Fuerzas Especiales de Estados Unidos que participaron en una incursión armada fallida destinada a derrocar al Gobierno venezolano. El lunes, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, mostró los pasaportes estadounidenses de los dos hombres, identificados como Airan Berry y Luke Denman. Un exintegrante de los Boinas Verdes llamado Jordan Goudreau ha reconocido que los hombres estaban trabajando con él para intentar detener al presidente venezolano. El lunes, Maduro acusó a Estados Unidos de estar detrás del complot.
El presidente Nicolás Maduro dijo: “Mike Pompeo apostaba a este ataque y creía que con este ataque se acababa la revolución, se acababa la Constitución, derrocaban al Gobierno, me asesinaban a mí. Dios nos libre y nos proteja”.