Israel y los Emiratos Árabes Unidos han llegado a un acuerdo para normalizar completamente las relaciones entre ambos países, a pesar de haber trabajado secretamente en conjunto durante años para oponerse a Irán, entre otros temas. En virtud del acuerdo, Israel acordó suspender temporalmente sus planes de anexar partes de Cisjordania, una medida que parecía ya haber estado suspendida debido a la condena internacional. Emiratos Árabes Unidos es el primer país del Golfo Pérsico en normalizar las relaciones con Israel y solo el tercer país del mundo árabe en hacerlo, después de Egipto y Jordania. La Autoridad Palestina rechazó y denunció el acuerdo trilateral y retiró a su embajador en los Emiratos Árabes Unidos. Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, admitió que Israel podría aún anexar Cisjordania.
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