La periodista colombiana Jineth Bedoya ha acusado a paramilitares de derecha respaldados por el Estado de secuestrarla, torturarla y violarla en el año 2000. Bedoya le dijo a la Corte Interamericana de Derechos Humanos que fue secuestrada en las afueras de una cárcel en la ciudad de Bogotá mientras realizaba un viaje para hacer un reportaje. Luego, fue drogada, golpeada y violada repetidas veces por varios atacantes. En ese momento, Bedoya estaba investigando escuadrones de la muerte paramilitares de derecha respaldados por Estados Unidos en Colombia. Bedoya dijo que, desde entonces, ha enfrentado décadas de “persecución, intimidación y amenazas constantes”. Colombia está tratando de impedir que la Corte Interamericana de Derechos Humanos siga adelante con el caso intentando obtener la recusación de cinco de los seis jueces de la corte. Bedoya habló sobre el impacto de su caso en un video publicado en las redes sociales a principios de marzo.
Jineth Bedoya: “Llevar mi caso ante un tribunal internacional no solamente es reivindicar lo que me ha ocurrido a mí como mujer y periodista, es también abrir una puerta de esperanza para miles de mujeres y niñas que como yo tuvieron que enfrentar la violencia sexual en medio del conflicto armado colombiano”.