El jueves, Estados Unidos registró cerca de 80.000 nuevos casos de coronavirus y 1.000 nuevas muertes por la enfermedad. Michigan sigue siendo el estado más afectado, pero los contagios están aumentando en algunas áreas del noreste del país, del estado de Texas, así como en partes de los estados más septentrionales del medio oeste.
En el estado de Carolina del Norte, las autoridades sanitarias cerraron el jueves un gran centro de vacunación después de que varios pacientes presentaran reacciones adversas inmediatamente después de recibir la vacuna contra la COVID-19 de Johnson & Johnson. El día anterior, también se habían reportado casos de náuseas y mareos en personas que recibieron la vacuna de Johnson & Johnson en el estado de Colorado.
La compañía Johnson & Johnson anunció el jueves que reducirá drásticamente la distribución de su vacuna contra la COVID-19 en Estados Unidos la próxima semana. Esto ocurre después de que uno de sus contratistas, la multinacional Emergent BioSolutions, informara que 15 millones de dosis en una planta de la ciudad de Baltimore estaban contaminadas y debían desecharse. Tras la noticia, la Casa Blanca ordenó a Johnson & Johnson que se haga cargo de la planta. Actualmente uno de cada cuatro adultos de Estados Unidos está completamente vacunado contra la COVID-19.