Los directores del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la Organización Mundial del Comercio y la Organización Mundial de la Salud están promoviendo un plan valuado en 50.000 millones de dólares para aumentar el acceso a las vacunas y poner fin a la pandemia más rápidamente. Los líderes de estos organismos señalan que los países de bajos ingresos han recibido menos del 1% de las vacunas administradas hasta ahora. En un comunicado conjunto, los líderes de las agencias señalan que “Algunos países ricos ya están hablando de implementar vacunas de refuerzo para sus poblaciones, pero la gran mayoría de las personas en los países en desarrollo, incluidos los trabajadores de la salud que se encuentran en la primera línea de batalla contra la pandemia, todavía no han recibido ni siquiera una primera dosis de la vacuna”.
Mientras tanto, un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo concluye que la pandemia del coronavirus ha provocado que más de 100 millones de trabajadores hayan caído en la pobreza, y que se hayan perdido 144 millones de puestos de trabajo en 2020.