Funcionarios de la ciudad de Mineápolis han comenzado a despejar el monumento ubicado en la intersección donde George Floyd murió a manos del oficial Derek Chauvin. En la mañana del jueves, los funcionarios quitaron las barreras de concreto y retiraron las flores, las artesanías y otras muestras de homenaje a las víctimas de la violencia policial. El sitio se ha convertido en un centro de protestas y se conoce informalmente como “la plaza George Floyd”. El director de la sección en el estado de Minesota del Consejo de Relaciones Islámico-Estadounidenses, Jaylani Hussein, se unió a los manifestantes que dijeron que continuarán haciendo uso de ese espacio.
Jaylani Hussein: “No están tratando de agilizar el tránsito en esta intersección; están tratando de ignorar los legados que forjaron a este país, desde el genocidio de los pueblos originarios hasta el actual encarcelamiento masivo de personas negras en todo el país y el continuo trato violento hacia la comunidad negra, como el asesinato de George Floyd y los muchos incidentes similares que han estado ocurriendo. No es que quieran permitir el paso de vehículos; lo que quieren es borrar la historia. Pero no les permitiremos que la borren”.