En Afganistán, la violencia y el caos continúan desatándose en los alrededores del aeropuerto de la ciudad de Kabul, al tiempo que Estados Unidos se apresura a evacuar a más personas. Siete afganos murieron el sábado en una estampida, mientras que el domingo se vio a los talibanes golpear a personas que intentaban huir. La OTAN dijo que al menos 20 personas murieron en el aeropuerto o sus alrededores durante la semana pasada. Un video desgarrador mostró cómo el viernes, en un intento desesperado, una multitud se pasaba a un bebé y se lo entregaba a marines estadounidenses por encima de un muro con alambre de púas. Más tarde se consiguió reunir al bebé con su padre. Asimismo, una evacuada afgana dio a luz a una niña a bordo de un avión de evacuación estadounidense, poco después de que el avión aterrizara en una base aérea en Alemania. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se pronunció el domingo sobre las evacuaciones en curso.
Presidente Joe Biden: “Estamos trayendo a nuestros ciudadanos, aliados de la OTAN y afganos que nos han, de hecho, ayudado en los esfuerzos bélicos. Pero tenemos un largo camino por delante y todavía hay mucho que podría salir mal”.
Biden también insinuó que Estados Unidos podría tener que extender su presencia en Afganistán más allá del 31 de agosto para continuar con las evacuaciones. Las fuerzas armadas estadounidenses han evacuado a 28.000 personas desde el fin de semana pasado.