Una investigación independiente descubrió más de 80 presuntos casos de abuso y agresión sexual a manos de trabajadores humanitarios en la República Democrática del Congo durante el brote de ébola que ocurrió entre 2018 y 2020. Veinte de los involucrados eran empleados de la Organización Mundial de la Salud. Decenas de sobrevivientes hablaron con los investigadores. Entre las declaraciones, hubo nueve denuncias de violación; intimidación y acoso sexual por parte de superiores en el trabajo; y promesas de favores a cambio de sexo. El martes, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ofreció una disculpa a las víctimas de los abusos.
Tedros Adhanom Ghebreyesus: “Lo siento. Lamento lo que les hicieron las personas que la OMS contrató para servirlos y protegerlos. Lamento el sufrimiento constante que debe causarles esta situación. Lamento que hayan tenido que revivirlo cuando hablaron con la comisión sobre sus experiencias”.