La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió el miércoles que se suspenda la administración de la tercera dosis de la vacuna contra la COVID-19 durante 2021. El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que los países ricos deberían, en cambio, poner al alcance de los países más pobres el limitado suministro de vacunas de las que se dispone.
Tedros Adhanom Ghebreyesus: “Hemos estado pidiendo una mayor equidad en la distribución de las vacunas desde el principio del proceso, no después de que los países ricos hayan vacunado a sus poblaciones. […] No me quedaré callado cuando las empresas y los países que controlan el suministro mundial de vacunas piensan que los pobres del mundo deben contentarse con los restos”.
El Gobierno de Biden ha rechazado repetidas veces los llamamientos de la OMS para detener la administración de las dosis de refuerzo hasta que los trabajadores de la salud y otros grupos de riesgo de los países más pobres puedan vacunarse. El miércoles, la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, expresó al respecto.
Secretaria de Prensa Jen Psaki: “Creemos que tener que elegir entre una u otra opción es una falsa dicotomía. Estados Unidos ha donado y compartido alrededor de 140 millones de dosis con más de 90 países, más que todos los demás países juntos”.