La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó reducir la producción de crudo en dos millones de barriles por día. Los países miembros de la OPEP, encabezados por Arabia Saudí y acompañados por Rusia, votaron este miércoles a favor de mantener altos los precios mundiales del crudo al imponer el mayor recorte del suministro mundial de petróleo desde el comienzo de la pandemia de COVID-19.
El Gobierno de Biden criticó duramente la medida y afirmó que reducir la producción de petróleo mientras la economía mundial sufre los impactos negativos de la invasión rusa de Ucrania es una “decisión miope”.
Esto se produce en medio de los crecientes llamamientos para que el Gobierno de Biden prohíba las exportaciones de gasolina, diésel y otros combustibles refinados de Estados Unidos. La organización Food & Water Watch dijo en un comunicado: “Los líderes políticos de nuestro país deben entender que la solución no es aumentar las perforaciones. Las compañías [de petróleo y gas] están exportando cantidades récord de combustible y, como resultado, están obteniendo ganancias récord. […] Es hora de tomar medidas realmente efectivas para frenar estas escandalosas ganancias excesivas de las corporaciones”.
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