Tres días después de que los ciudadanos estadounidenses emitieran su voto en unas elecciones de mitad de mandato de importancia crítica, el equilibrio de poder en el Congreso de Estados Unidos depende de los resultados de tres contiendas electorales para escaños en el Senado y 30 contiendas para escaños en el Cámara de Representantes, que siguen sin definirse. En el estado de Georgia, el senador demócrata Rafael Warnock inició este jueves una renovada campaña de reelección después de que no alcanzara, por un estrecho margen, el 50 por ciento de los votos que se necesitan en ese estado para evitar una segunda vuelta. El 6 de diciembre Warnock se volverá a enfrentar en elecciones de segunda vuelta contra su oponente republicano Herschel Walker, ex estrella del fútbol americano y aliado de Trump.
Senador Raphael Warnock: “Necesito que peleen como si el futuro de Georgia y el futuro de Estados Unidos dependieran de ello, porque así es. ¿Están listos para pelear?”.
Seguidores: “¡Sí!”.
Senador Raphael Warnock: “¿Están listos para hacerlo?”.
Seguidores: “¡Sí!”.
En el estado de Nevada, el republicano Adam Laxalt, quien sostiene la teoría del fraude electoral en las elecciones de 2020, supera a la actual senadora demócrata Catherine Cortez Masto por menos de 9.000 votos, pero aún faltan escrutar 100.000 papeletas de voto por correo. En el estado de Arizona, el actual senador demócrata Mark Kelly aventaja por más de 110.000 votos al candidato republicano respaldado por Trump Blake Masters, con un 18% de los votos por contar. La contienda por la gobernación de Arizona está incluso más reñida; la candidata demócrata Katie Hobbs supera a la republicana Kari Lake, respaldada por Trump, por un margen un poco mayor a un punto porcentual. Lake ha negado repetidas veces la legitimidad de los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 y ha dicho que solo aceptaría los resultados de estas elecciones si estos le son favorables.
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