Naciones Unidas ha negociado una tregua de dos meses en Yemen, país que está atravesando la peor crisis humanitaria del mundo. Los rebeldes hutíes y la coalición liderada por Arabia Saudí y respaldada por Estados Unidos acordaron detener todas las ofensivas militares dentro de Yemen y más allá de sus fronteras. Ahora podrán ingresar buques de combustible a los puertos de la ciudad de Hodeidah, y se reanudarán vuelos en el aeropuerto de Sanaa. Durante los últimos seis años, la ONU estima que la guerra en Yemen ha provocado la muerte de casi 400.000 personas, muchas de las cuales murieron de hambre. Residentes de Yemen celebraron la interrupción de los enfrentamientos.
Khaled Ali: “Tenemos mucho optimismo en cuanto a esta tregua, pero sufrimos por la situación económica grave del país. Los precios de los derivados [del petróleo] y de los productos alimenticios básicos son altos. Ante la llegada del mes bendito de Ramadán, hay familias que ni siquiera tienen la comida que necesitan”.