El lunes, Filipinas celebró unas elecciones presidenciales que están siendo seguidas de cerca. Se espera que Ferdinand Marcos, hijo del difunto dictador filipino del mismo nombre, gane la contienda presidencial en la que participan diez candidatos. Su principal rival es Leni Robredo, la actual vicepresidenta del país. Según la Constitución de Filipinas, el presidente Rodrigo Duterte no podía postularse para un segundo mandato. Ferdinand Marcos hijo ha pasado décadas defendiendo el brutal régimen de su padre, durante el que se torturó a 34.000 personas y se asesinó a más de 3.200 personas entre 1965 y 1986.
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