La Organización Mundial de la Salud advierte que las devastadoras inundaciones que afectan a Pakistán han dejado a más de tres millones de niños y niñas en necesidad de asistencia humanitaria y en mayor riesgo de contraer enfermedades, sufrir desnutrición o perder la vida por ahogamiento. La OMS ha declarado las inundaciones como una “emergencia de grado 3”, el nivel más alto de su sistema de clasificación. Nuevas imágenes satelitales muestran cómo las lluvias monzónicas sin precedentes han creado un lago interior de unos 100 kilómetros de ancho alrededor del desbordado río Indo y han dejado una gran región de Pakistán bajo el agua. Funcionarios de las Naciones Unidas advierten que las inundaciones en torno a hospitales y clínicas podrían agravar la propagación de enfermedades transmitidas por el agua como el dengue y la malaria.
Stéphane Dujarric: “Según las cifras del Gobierno [pakistaní], unas 900 instalaciones sanitarias han sido dañadas o destruidas en Pakistán, lo que ha dejado a millones de personas sin acceso a la atención y los tratamientos médicos”.