Una misión de las Naciones Unidas ha llegado a Nagorno Karabaj por primera vez en tres décadas, al tiempo que el Gobierno de Armenia advierte que prácticamente la totalidad de las 120.000 personas de etnia armenia que allí residían han huido tras la ofensiva militar que Azerbaiyán llevó a cabo en septiembre para tomar el control del territorio en disputa. La representante de la Agencia de la ONU para los Refugiados en Armenia dijo que los centros gubernamentales de registro se han visto abarrotados por un gran número de refugiados que se encuentran agotados y asustados, un tercio de los cuales son menores.
Kavita Belani: “La gente está cansada. Esta es una situación en la que han vivido nueve meses de bloqueo. No es algo que acaba de suceder, donde uno coge [sus cosas] y se va. [Los armenios de Nagorno Karabaj] ya han sufrido nueve meses de bloqueo. Y cuando llegan aquí, están llenos de ansiedad, están asustados, están aterrados, y quieren respuestas. Quieren respuestas sobre lo que va a pasar después”.
Armenia ha acusado a Azerbaiyán de estar llevando a cabo una limpieza étnica. El lunes, el enviado de Armenia ante la Unión Europea instó a los países de Occidente a sancionar a Azerbaiyán, incluida su lucrativa industria del petróleo y el gas, y solicitó ayuda militar para Armenia.