El rey Carlos III ha reconocido el “profundo pesar” del Reino Unido por los “aborrecibles e injustificables actos de violencia” que el país cometió contra su antigua colonia Kenia. Sin embargo, el rey no pidió disculpas durante el discurso que pronunció en un banquete en el que participó como parte de su viaje de cuatro días al país africano. La Comisión de Derechos Humanos de Kenia había pedido al rey Carlos III que ofreciera una “disculpa pública inequívoca”. Dicha organización estima que durante la rebelión del movimiento de resistencia armada, conocido como “los Mau Mau”, que tuvo lugar en la región central de Kenia entre 1952 y 1960, unos 90.000 kenianos fueron ejecutados o mutilados, mientras que otros 160.000 fueron detenidos. El Reino Unido acordó en 2013 pagar 20 millones de libras en compensación por las atrocidades que cometió.
Estas fueron las palabras expresadas por el bisnieto del rey Koitalel arap Samoei, un jefe del pueblo nandi que luchó para poner fin al dominio colonial británico a principios del siglo XX.
Kipchoge arap Chomu: “De hecho, no lo pedimos. De hecho, tenemos que exigir una disculpa pública por parte del Gobierno británico por las atrocidades que cometieron contra nuestro pueblo. Lo primero [que exigimos] es una disculpa. Después de las disculpas, también esperamos una reparación”.
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