El presidente Joe Biden pidió el lunes a Israel que redujera sus ataques contra objetivos civiles y dijo que sus militares deberían tomar lo que denominó “medidas menos intrusivas” en el principal centro médico de la Franja de Gaza, el hospital Al-Shifa. Asimismo, Biden dijo: “El hospital debe ser protegido”. Sus comentarios se produjeron después de que Médicos sin Fronteras informara que soldados israelíes habían disparado contra equipos médicos y una ambulancia con la que se intentaba rescatar a las personas heridas que se encontraban en las puertas del Al-Shifa. Al menos un francotirador israelí disparó contra el hospital e hirió a pacientes. Otros informaron que habían sido alcanzados por los disparos de drones israelíes que volaban a baja altura. Israel afirma que el grupo Hamás tiene un centro de mando debajo del edificio del hospital, pero los funcionarios del centro médico han negado dicha afirmación.
La organización Human Rights Watch ha pedido que los ataques israelíes contra los hospitales de Gaza se investiguen como crímenes de guerra. En febrero, Biden firmó una orden ejecutiva que prohibía a Estados Unidos suministrar armas a países que podrían utilizarlas para atacar a civiles. Sin embargo, el Gobierno de Biden aprobó la semana pasada un acuerdo de 320 millones de dólares para suministrar a Israel bombas guiadas de precisión; y Biden está pidiendo al Congreso de Estados Unidos 14.000 millones de dólares además de los 3.800 millones que el país le proporciona anualmente a Israel en concepto de ayuda militar.
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