El presidente chino, Xi Jinping, aterrizó en Moscú para mantener conversaciones con el presidente Vladimir Putin. Esta es la primera vez que el mandatario chino visita Rusia desde que su vecino invadió Ucrania. La muestra de apoyo a Putin por parte de Pekín se produce pocos días después de que la Corte Penal Internacional emitiera una orden de arresto contra Putin por cometer crímenes de guerra debido a la deportación ilegal de menores ucranianos a Rusia. Estas fueron las palabras expresadas por el presidente de la Corte Penal Internacional, Piotr Hofmanski.
Piotr Hofmanski: “Los jueces han revisado la información y las pruebas presentadas por el fiscal de la [Corte Penal Internacional] y han determinado que existen acusaciones creíbles contra estas personas por los presuntos crímenes [de guerra]. La Corte Penal Internacional está haciendo su parte como tribunal de justicia. Los jueces emitieron órdenes de arresto y la ejecución [de dichas órdenes] depende de la cooperación internacional”.
Putin podría ser arrestado si viaja a un país miembro de la Corte Penal Internacional. Tanto Rusia, como Estados Unidos, China e India, que organizará la cumbre del G20 en la ciudad de Nueva Delhi en diciembre de 2023, no son países miembros de dicha corte. En un claro acto desafiante, Putin visitó Mariúpol, una ciudad de Ucrania que se encuentra ocupada por Rusia y representa el símbolo de la resistencia ucraniana. Asimismo, Putin visitó el sábado la península de Crimea para conmemorar el noveno aniversario de la anexión de esta península ucraniana a territorio ruso.
En otras noticias sobre la guerra, Rusia, Ucrania, Turquía y la ONU acordaron el viernes extender por 120 días un acuerdo que permite el envío de cereales ucranianos a través de los puertos del mar Negro.
En Estados Unidos, el periódico The Guardian está informando que el Gobierno del presidente Biden ha reanudado silenciosamente las deportaciones de inmigrantes a Rusia, luego de haberlas suspendido en 2022 tras la invasión de Ucrania. Muchas de las personas que enfrentan la deportación podrían terminar en prisión o en el frente de guerra si son enviadas a Rusia.
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