En el estado de Texas, tres policías de la ciudad de San Antonio fueron suspendidos y arrestados tras ser acusados de homicidio por matar a disparos a una mujer de 46 años en su propia casa. Los policías golpearon y abrieron fuego contra Melissa Pérez cuando ella los amenazó con un martillo mientras sufría una aparente crisis de salud mental. El jefe de policía de San Antonio dijo el viernes que el accionar del sargento Alfred Flores y de los oficiales Eleazar Alejandro y Nathaniel Villalobos “no fue coherente” con las políticas y el entrenamiento de uso de la fuerza del departamento.
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