En Grecia, al menos una persona ha muerto y miles se han visto obligadas a abandonar sus hogares, al tiempo que los bomberos luchan contra un incendio forestal que arde alrededor de la capital del país, Atenas. Las personas sobrevivientes cuentan cómo se vieron obligadas a huir de sus hogares debido a que las llamas se acercaban.
Sakis Morfis: “Mi casa quedó completamente destruida. Hasta los muros se derrumbaron. […] No quedó nada. No tenemos ánimo ni valentía. Ya no hay dinero. Todo quedó destruido”.
El incendio que azota Grecia ha sido alimentado por temperaturas récord y vientos fuertes, y se produce luego de que el país registrara los meses de junio y julio más calurosos y el invierno más cálido de su historia.