El alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y el alto representante de la Unión Europea para Política Exterior se han convertido en los líderes más recientes en pedir una desescalada urgente del conflicto en Medio Oriente. Esto se produce en medio de informes que revelan que Irán estaría por llevar a cabo un inminente ataque de represalia contra Israel y al tiempo que crecen los temores de que se desate una guerra regional más amplia. El presidente Biden se reunió el lunes con su equipo de Seguridad Nacional y el comandante del Comando Central de Estados Unidos llegó en la mañana de este martes a Israel. Diferentes embajadas extranjeras en el Líbano están evacuando a sus ciudadanos del país y la región.
Mientras tanto, varios miembros del personal de las fuerzas armadas estadounidenses resultaron heridos el lunes en un presunto ataque con misiles contra la base aérea de al-Asad, en Irak. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, habló el lunes.
Secretario de Estado Antony Blinken: “Estamos inmersos en una intensa labor diplomática que nos demanda prácticamente las 24 horas del día y cuyo mensaje es muy simple: Todas las partes deben abstenerse de aportar a una escalada [del conflicto en Medio Oriente]. Todas las partes deben tomar medidas para aliviar las tensiones. La escalada no beneficia a nadie. Solo conducirá a más conflicto, más violencia y más inseguridad”.