En Estados Unidos, en el estado de Arizona, la Nación Hualapai ha presentado una demanda contra la Oficina de Administración de Tierras por haber aprobado un proyecto de exploración de litio. La demanda acusa a la agencia federal de no evaluar de manera adecuada el impacto del proyecto en los pozos y manantiales de agua locales.
Mientras tanto, en el Reino Unido, la policía arrestó a 22 personas por planificar un “campamento climático” en las inmediaciones de la central eléctrica de Drax, situada en el condado de Yorkshire del Norte. Este constituye el último ejemplo del aumento de la criminalización del activismo climático por parte de las autoridades del Reino Unido, incluso antes de que se lleve a cabo cualquier acción.