El Ejército de Israel intensificó el martes sus ataques contra la Franja de Gaza, donde una serie de bombardeos contra una escuela que alberga a personas desplazadas y barrios residenciales densamente poblados mató en un período de 24 horas a 62 personas. El intenso ataque con artillería israelí ha dejado sin electricidad al hospital Indonesio del norte de Gaza. En Rafah, un ataque de Israel contra una vivienda mató a cinco personas, incluida una mujer, y causó heridas a otras cuatro.
En el centro de Gaza, al menos diez palestinos murieron el martes en un ataque aéreo israelí contra una vivienda de Deir al-Balah. Estas fueron las palabras expresadas por Kifaya Shaqoura, una palestina desplazada que perdió a miembros de su familia en dicho bombardeo.
Kifaya Shaqoura: “Estábamos durmiendo y, de repente, nos llamaron para decirnos que la familia había sido martirizada. Estaban alquilando la casa de Shahin. Mis tíos la habían alquilado. Comenzamos a leer las noticias, un reporte tras otro, y todos los nombres aparecían en orden. Nos quedamos impactados con la noticia. Entre ellos estaban mi tío, su esposa; mi tío, su hijo y su hija, que había sido desplazada con sus hijos”.
El Ministerio de Salud de Gaza afirma que los ataques más recientes han elevado la cifra oficial de muertos a causa de la guerra de Israel en el enclave palestino, que se ha estado librando durante 15 meses, a más de 46.700, mientras que el número oficial de heridos asciende a 110.000, aunque un estudio reciente que fue publicado en la revista médica británica The Lancet concluye que el número real de muertos en la Franja probablemente sea un 40% mayor.
La intensificación de los ataques del martes se produjo incluso cuando los mediadores de un alto el fuego en Gaza dijeron que el acuerdo entre Israel y Hamás estaba en su “punto más cercano” hasta la fecha.