Uno de los miembros recientemente destituidos de la junta directiva del Centro Kennedy para las Artes Escénicas, el aclamado músico Jon Batiste, cantó el himno estadounidense al comienzo del Super Bowl, que se llevó a cabo el domingo por la noche con la presencia de Donald Trump en las gradas del estadio. Antes del partido, la Liga Nacional de Fútbol Americano eliminó las palabras “Acabemos con el racismo” de las zonas de anotación.
Durante la actuación del rapero Kendrick Lamar en el espectáculo de medio tiempo, uno de los bailarines desplegó las banderas de Sudán y Palestina. El artista logró correr alrededor del campo de juego sosteniendo la bandera durante unos 20 segundos, antes de ser derribado y arrestado por guardias de seguridad.