Microsoft despidió a dos empleadas que interrumpieron la celebración del 50 aniversario de la compañía para protestar por los vínculos de la empresa con los ataques israelíes contra Gaza. Microsoft suministra servicios de inteligencia artificial y tecnología en la nube a las fuerzas armadas israelíes a través de la plataforma Microsoft Azure. La ingeniera de software Ibtihal Aboussad, organizadora de la coalición de empleados de Microsoft denominada “No Azure para el Apartheid” confrontó al director ejecutivo de inteligencia artificial de Microsoft, Mustafa Suleyman.
Mustafa Suleyman: “La pregunta que quería abordar hoy es muy sencilla: ¿Qué significa todo esto?”.
Ibtihal Aboussad: “Mustafa, ¡debería darle vergüenza! Usted dice que le preocupa que la inteligencia artificial se utilice para hacer el bien, pero Microsoft vende armas [impulsadas por] inteligencia artificial al Ejército israelí. Unas 50.000 personas han muerto [en Gaza] y Microsoft está impulsando este genocidio en nuestra región, Mustafa”.
Mustafa Suleyman: “Gracias por su protesta. La escucho”.
Ibtihal Aboussad: “Su familia siria está enterada de esto, Mustafa. Usted es un mercader de la guerra”.
Mustafa Suleyman: “Escucho su protesta. Muchas gracias”.
Ibtihal Aboussad: “¡Debería darle vergüenza! ¡Usted es un mercader de la guerra!”.
Mustafa Suleyman: “Escucho lo que dice. Muchas gracias”.
Ibtihal Aboussad: “¡Deje de usar la inteligencia artificial para el genocidio, Mustafa!”.
La semana pasada, el Comité Nacional del movimiento por los derechos del pueblo palestino Boicot, Desinversiones y Sanciones anunció que Microsoft es un “objetivo prioritario” y exhortó a los consumidores a suspender las suscripciones de juegos y productos de la compañía, como Xbox.
En otras noticias sobre tecnología, una investigación de la cadena Al Jazeera concluye que Facebook dio espacio a más de 100 anuncios pagados que promocionaban asentamientos ilegales en los territorios ocupados de Cisjordania. En los anuncios, aprobados por Meta, la empresa matriz de Facebook, se pedía la demolición de viviendas, escuelas y parques infantiles palestinos, y se hacían llamamientos para recaudar fondos para el Ejército israelí.