Varios congresistas demócratas de los estados de California y Nueva York denunciaron que se les impidió ingresar a cárceles del Servicio de Inmigración para inspeccionar la seguridad y verificar el estado de las personas arrestadas durante las recientes redadas masivas. Entre el grupo se encuentra la congresista de California Maxine Waters, quien el domingo intentó inspeccionar las condiciones del Centro de Detención Federal Metropolitano, donde estaba encarcelado David Huerta, presidente de la delegación en California del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios.
En la ciudad de Nueva York, los congresistas Nydia Velázquez y Adriano Espaillat dijeron que no les permitieron inspeccionar una instalación del Servicio de Inmigración ubicada en el edificio 26 de Federal Plaza, donde activistas sostienen que más de 100 inmigrantes, recientemente arrestados en audiencias de tribunales federales, están recluidos en celdas abarrotadas. Según se informa, las personas detenidas también han sido obligadas a dormir en el suelo de los baños.