Protestas masivas estallaron el martes en Argentina después de que la Corte Suprema ratificara la sentencia de seis años de prisión para la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, así como la inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos, en el contexto de una causa por corrupción. Cristina Kirchner, una líder populista conocida como una “defensora de los pobres”, criticó el fallo del alto tribunal y las políticas de austeridad del presidente argentino, Javier Milei.
Cristina Fernández de Kirchner: “Creo que se equivocan porque me pueden meter presa, pero la gente cobra salarios de miseria o pierde el trabajo. Me pueden meter presa, pero las jubilaciones van a seguir sin alcanzar y no van a llegar a fin de mes. Me pueden meter presa, pero los medicamentos cada vez están más caros y más inaccesibles, no solamente para los jubilados, sino para cualquier compatriota. Me pueden meter presa, pero los padres van a seguir creyendo que sus hijos tienen derecho a comer cuatro comidas por día. Pueden hacer todo eso y no les va a servir. Tomará más o menos tiempo”.
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