Ha surgido una gran brecha dentro del movimiento de apoyo a Trump denominado MAGA debido a la forma en que su Gobierno ha manejado el caso de Jeffrey Epstein, el fallecido depredador y traficante sexual en serie a quien el mandatario estadounidense calificó en un tiempo como un “tipo excelente”. El sábado, Trump respaldó a la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, días después de que esta publicara un memorando en el que afirmaba que Epstein no tenía una lista de clientes y que no se justificaba hacer más divulgaciones, a pesar de que ella había afirmado anteriormente que la lista de clientes estaba en su escritorio. Según se informa, esto condujo a una acalorada confrontación entre Bondi y Dan Bongino, subdirector del FBI. Bongino no fue a trabajar el viernes y, según se informa, consideró renunciar por el tema.
El sábado, en una larga publicación en redes sociales, Trump instó a sus simpatizantes a olvidarse de los archivos de Epstein, lo que provocó indignación en muchos de ellos. Mientras tanto, el congresista demócrata Ro Khanna planea presentar una enmienda para forzar una votación que exija que los archivos completos de Epstein se hagan públicos. Khanna escribió al respecto: “¿Por qué los archivos de Epstein siguen ocultos? ¿Quiénes son los ricos y poderosos a los que se está protegiendo?”.