El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo ha hecho un llamamiento urgente a Israel para que permita el ingreso de mayores cantidades de combustible a Gaza. En un comunicado, la agencia señaló: “Sin combustible, todos los bienes y servicios vitales desaparecerán para 2,1 millones de personas”.
Mientras tanto, la Agencia de Naciones Unidas para la población refugiada de Palestina (UNRWA) afirmó el martes que uno de cada diez menores en Gaza que han sido atendidos en clínicas de la ONU desde 2024 sufre de desnutrición y que las tasas de esa condición están aumentando en medio del bloqueo israelí al ingreso de ayuda humanitaria al enclave palestino.
Todo esto se produce al tiempo que Israel continúa lanzando ataques en diversas partes de la Franja de Gaza, incluido el bombardeo contra una tienda de campaña que albergaba a una familia desplazada en Jan Yunis. Belal Al-Adlouny describió cómo el ataque mató a gran parte de la familia de su hermano.
Belal Al-Adlouny: “Fueron martirizados dentro de su tienda de campaña. Hossam se estaba refugiando allí con su esposa e hijos. Bombardearon la tienda. Nadie sobrevivió, excepto el hijo mayor de mi hermano, Mohammad, que estaba fuera recogiendo agua cerca de la tienda. El resto fue martirizado. Hossam fue martirizado, al igual que su esposa, Soaad, que estaba embarazada de ocho meses; su hijo Abdel Rahman, de 14 años; y sus hijas Fayrouz y Shahd”.