Los legisladores demócratas estatales de Texas regresaron el lunes al estado y pusieron fin así a una ausencia de dos semanas que había roto el cuórum en la Legislatura estatal e impedido temporalmente que los republicanos aprobaran un nuevo mapa congresual manipulado a su favor a instancias del presidente Trump. Los líderes republicanos habían amenazado con arrestar o destituir de sus cargos a más de 50 legisladores demócratas que abandonaron Texas a principios de este mes hacia Illinois y otros estados del país. El presidente de la Cámara de Representantes de Texas, el republicano Dustin Burrows, dijo el lunes que los legisladores demócratas solo podrán abandonar la Cámara Baja estatal si aceptan ser puestos bajo la custodia de las fuerzas de seguridad del estado. Tras negarse a aceptar la vigilancia constante de la policía estatal, la legisladora demócrata Nicole Collier, representante del distrito 95 en la ciudad de Fort Worth, se vio obligada a dormir en el piso del Capitolio estatal.
Legisladora estatal Nicole Collier: “Estos agentes han sido asignados a los representantes estatales demócratas únicamente para asegurar su regreso al Capitolio con el fin de aprobar mapas congresuales racistas y otras leyes que [los republicanos] quieren aprobar, pero que podrían perjudicar y privar de derechos a comunidades marginadas”.