Israel ha anunciado planes para convocar a 60.000 reservistas al tiempo que intensifica su ofensiva para tomar el control total de la ciudad de Gaza y expulsar por la fuerza a toda su población. La cadena Al Jazeera informa que Israel está llevando a cabo “demoliciones sistemáticas” de viviendas palestinas en diferentes partes de la ciudad de Gaza. El miércoles, 81 palestinos perdieron la vida a manos de las fuerzas armadas de Israel, incluidos cinco que murieron en un ataque israelí contra una tienda de campaña del campamento de refugiados de Shati, en la ciudad de Gaza. El ataque mató a tres menores de edad, de 4, 7 y 9 años, y a sus padres. Asimismo, Israel ha matado a otros 20 palestinos desde la madrugada de este jueves. Al menos otros dos palestinos han muerto de inanición, por lo que el número total de muertes por inanición asciende a 271.
Mientras tanto, un periódico israelí ha revelado que las fuerzas armadas de Israel tienen una “Unidad de Reubicación de Población”, cuya finalidad es supervisar el desplazamiento forzado de los palestinos en Gaza.
En la mañana de este jueves, el secretario general de la ONU, António Guterres, condenó la escalada de la ofensiva israelí en la ciudad de Gaza.
Secretario general António Guterres: “Debo reiterar que es de vital importancia alcanzar de inmediato un alto el fuego en Gaza y [llevar a cabo] la liberación incondicional de todos los rehenes, así como evitar las muertes y la destrucción masivas que acarreará de forma inevitable una operación militar contra la ciudad de Gaza”.