La Cámara de Representantes del estado de Texas, que está liderada por los republicanos, ha aprobado un nuevo mapa congresual que está diseñado para otorgarle en las elecciones de mitad de mandato de 2026 al Partido Republicano cinco escaños de la Cámara de Representantes de Estados Unidos que en la actualidad se encuentran liderados por demócratas. Tras una votación que siguió las líneas ideológicas partidarias, el miércoles se aprobó un proyecto de ley que tiene como finalidad que los mapas congresuales se rediseñen a favor de los republicanos. La legislación ahora será sometida a votación en el Senado de mayoría republicana de Texas, donde su aprobación está prácticamente garantizada. Esta inusual redistribución de los distritos congresuales de Texas a mediados de la década, se produce a pedido del presidente Trump. La aprobación del proyecto de ley se retrasó por semanas, después de que más de 50 legisladores demócratas abandonaran el estado para que los republicanos no contaran con el cuórum necesario para concretar la votación. Dichos legisladores regresaron esta semana a la ciudad de Austin, luego de que líderes republicanos los amenazaran con arrestarlos o destituirlos de sus cargos y reemplazarlos. El legislador de la ciudad de Houston Jon Rosenthal dijo que presentará, junto con otros demócratas, una demanda para bloquear el mapa manipulado de los distritos electorales una vez que el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, lo promulgue como ley.
Congresista Jon Rosenthal: “No se trata solo de acumulación de poder. Se trata de que, como van a perder, quieren obtener más votos, pero, para lograrlo, están desmantelando los distritos de las comunidades negras, latinas y de otras personas de color. Y seamos realistas: esta es una acumulación de poder racista que afecta particularmente a nuestros representantes afroestadounidenses en el Congreso”.
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