El Gobierno de Trump afirma que volverá a instalar cerca del Capitolio de Estados Unidos la estatua de un general confederado que fue derribada en 2020 por manifestantes de Black Lives Matter. La estatua de bronce de Albert Pike se instaló por primera vez en 1901. En un comunicado, la delegada sin derecho a voto del Distrito de Columbia, Eleanor Holmes Norton, escribió al respecto: “La decisión de volver a instalar la estatua de Albert Pike para honrarlo es tan extraña e indefendible como moralmente objetable. Pike sirvió de manera deshonrosa. Levantó las armas contra Estados Unidos, malversó fondos y finalmente fue capturado y encarcelado por sus propios soldados”.
Por otra parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, anunció el lunes que volverá a instalar otro monumento conmemorativo de la Confederación en el Cementerio Nacional de Arlington del estado de Virginia.