En Haití, las protestas por el aumento del costo de los alimentos ingresaron a la segunda semana. El miércoles, las fuerzas de la ONU lanzaron gas lacrimógeno y balas de goma a una multitud de personas frente al Palacio Nacional. Los precios de los alimentos básicos, como el arroz, los frijoles y la fruta, aumentaron un 50% en el último año.
Una manifestante dijo: “No podemos vivir. Un kilo de arroz se está vendiendo a 30 dólares haitianos. No tenemos dinero para alimentar a nuestros hijos”.
Al menos cinco personas murieron y más de cuarenta resultaron heridas durante una semana de protestas. La protesta por los precios de los alimentos en Haití es una de las tantas que han afectado a varios países del mundo en las últimas semanas. El miércoles, la Organización de Alimentos y Agricultura de la ONU (FAO, por sus siglas en inglés) advirtió que las protestas se extenderían aún más a menos que la comunidad internacional intervenga para revertir los crecientes precios. Varios factores han contribuido, entre ellos las sequías y una creciente demanda de biocombustibles como el etanol, que aumentan los precios de los alimentos al hacer que los cultivos destinados a la alimentación sean cada vez más escasos.