En materia electoral, los senadores Hillary Clinton y John McCain siguen atacando al senador Barack Obama por su comentario de que los votantes en el área rural de Estados Unidos se han vuelto unos amargados y que se aferran a las armas o a la religión como una forma de explicar su frustración. El lunes, la senadora Hillary Clinton habló en el Foro de la Alianza para la Manufacturación Estadounidense, en Pittsburgh.
La senadora Clinton dijo: “Él le estaba explicando a un pequeño grupo de donantes cómo son las personas que viven en pequeños pueblos aquí mismo, en Pensilvania, y por qué algunos de ustedes no lo votan. Pero en lugar de mirarse a sí mismo, los culpó a ellos, dijo que se están aferrando a la religión y a las armas y que no les gustan las personas diferentes a ellos. Bueno, yo no creo que sea así. Creo que las personas no se aferran a la religión, sino que valoran su fe. Uno no se aferra a las armas, sino que disfruta la caza o el coleccionismo o los juegos de tiro al blanco. No creo que él realmente lo entienda. Esas personas buscan un Presidente que los defienda y no que los desprecie”.
El senador McCain calificó los comentarios de Obama de “elitistas”, y dijo que demuestran una “falta de entendimiento intrínseca del pueblo estadounidense”. El senador Obama respondió a las críticas cuestionando si Clinton y McCain realmente están en contacto con los votantes de Pensilvania.
El senador Obama dijo: “Ustedes saben, últimamente se ha hablado mucho en esta campaña sobre quién está 'en contacto' con los trabajadores de Pensilvania. La senadora Clinton y el senador McCain están repitiendo lo mismo, alegando que no estoy en contacto y que soy 'elitista', porque dije que muchas personas están amargadas por su situación económica. Bien, puede que no haya elegido las palabras correctas. No sería la primera vez ni la última. Pero cuando escucho a mis oponentes, que han pasado décadas en Washington, decir que no estoy en contacto, es momento de ir más allá de su retórica y mirar la realidad”.
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