A cuatro días de iniciada la cumbre de Copenhague, las acciones de protesta continúan dentro del Bella Center, así como en todo el mundo. El miércoles, centenares de personas realizaron una protesta en el interior del recinto de la cumbre en apoyo a los países insulares. La concentración se produjo poco después de que Tuvalu, país que además es una isla, interrumpió una sesión de la conferencia para reclamar que el tope a los aumentos globales de temperatura se fije en 1,5 grados Celsius, en lugar de los propuestos 2 grados. Mientras tanto, en Italia, activistas de Greenpeace escalaron el histórico Coliseo de Roma y desplegaron una pancarta en la que se reclamaba un tratado mundial vinculante para enfrentar el calentamiento global.
Un manifestante declaró: “En el día de hoy Greenpeace está participando en esta manifestación para pedir a los líderes mundiales que se encuentran en Copenhague que alcancen un acuerdo histórico para salvar el clima y nuestro futuro. Mañana, el Presidente Barak Obama estará en Oslo para recibir el premio Nobel de la Paz. Bueno, el cambio climático y la paz son dos caras de la misma moneda”.