Un tribunal brasileño autorizó la construcción de una de las represas hidroeléctricas más grandes del mundo a pesar de la oposición de las comunidades indígenas del lugar. El miércoles, el tribunal determinó que se procediera con la construcción de la represa de Belo Monte en el estado norteño de Pará, a pesar del masivo movimiento popular contra el proyecto. Fiscales federales del estado presentaron una petición para detener la construcción hasta que los grupos indígenas fueran consultados y se les permitiera el acceso a los informes de impacto ambiental. El gobierno brasileño afirma que la represa proveerá de energía limpia y renovable y contribuirá al crecimiento económico del país. Sin embargo, quienes se oponen al proyecto alegan que la represa devastará la flora y fauna silvestre así como el sustento de unas cuarenta mil personas que viven en la zona.
Tribunal brasileño autoriza represa de Belo Monte
Titular10 Nov. 2011