Se produjo una división en el interior del OTAN por el bombardeo de Libia. Italia está exhortando a otros estados miembros a detener el ataque internacional y permitir la entrega de ayuda humanitaria. Pero los líderes de la OTAN dicen que seguirán lanzando ataques, ya que cualquier pausa podría aumentar la cantidad de bajas civiles y fortalecer al líder libio Mouammar Gaddafi. Según se informa, un ataque aéreo de la OTAN provocó la muerte de civiles —entre ellos dos niños— en Trípoli, la capital. Miles de personas se reunieron el miércoles para sepultar a los fallecidos.
El vocero del gobierno libio Moussa Ibrahim condenó los bombardeos de la OTAN y declaró: “Hemos hecho llamados a la paz y las negociaciones durante días y meses y ahora nadie quiere escucharnos. Tenemos que pagar un precio muy alto de bajas civiles y militares. Creo que ya es hora de que el mundo comprenda que este conflicto debe terminar de inmediato”.