En total, los expertos afirman que el huracán sería uno de los desastres más costosos en la historia de Estados Unidos, con daños de hasta 10.000 millones de dólares. La preocupación de que los residentes más afectados tengan que hacerse cargo de la totalidad de los gastos va en aumento, ya que los planes comunes de las aseguradoras cubren los daños provocados por vientos, pero no por inundaciones. Una revisión realizada por Kinetic Analysis Corporation sostiene que las aseguradoras terminarán cubriendo menos del 40% de los costos, debido a que no hay seguros contra inundación y al drástico incremento de los deducibles en las áreas costeras.
Aseguradoras podrían eludir el grueso de los costos del huracán Irene
Titular31 Ago. 2011