La violencia en Siria ha provocado tensiones diplomáticas entre Estados Unidos y los aliados de Siria: Rusia y China. Tras nuevas negociaciones en la cumbre del G20 en México, el Presidente Obama afirmó que ambas partes permanecen distanciadas con respecto a una solución a la violencia.
El Presidente Obama declaró: “Mantuvimos una conversación muy sincera. No diría en este momento que Estados Unidos y el resto de la comunidad internacional están alineados con Rusia y China en sus posiciones, sin embargo creo que reconocen los graves peligros de una guerra civil”.