El ex combatiente de la Resistencia francesa Stéphane Hessel murió a los 95 años. Hessel se unió a ese movimiento durante la Segunda Guerra Mundial, fue capturado por la Gestapo y enviado al campo de concentración de Buchenwald. Escapó cuando era transferido a Bergen-Belsen y más adelante contribuyó a la redacción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU. En 2010, su panfleto ¡Indignáos!, que en realidad tenía la extensión de un libro y se convirtió sorpresivamente en un éxito de ventas con millones de ejemplares vendidos en todo el mundo, inspiró movimientos de protesta como Occupy Wall Street. Mientras el movimiento se extendía en el otoño de 2011, Hessel explicó en Democracy Now! por qué lo animaba la idea de la resistencia no violenta.
Hessel dijo: “Es bueno que las jóvenes generaciones escuchen a los que son muy viejos cuando les dicen: ‘Participamos de la resistencia en una época en que estaba el fascismo o el estalinismo. Deben encontrar las cosas que no aceptan, las que los indignan. Y deben luchar contra ellas de una forma no violenta, pacífica, pero con determinación’. Por eso estoy tan contento con lo que está ocurriendo estos días en Wall Street, porque realmente son muy pacíficos. No tiran bombas ni piedras, pero están allí decididos a hacer que se respeten sus valores”.