El gobierno de Barack Obama ha puesto en marcha una revisión de los procedimientos de ejecución, tras la ejecución fallida de un preso condenado a muerte en Oklahoma la pasada semana. Clayton Lockett murió de un ataque al corazón 43 minutos después de haber sido inyectado con químicos no testeados en la ingle. Los funcionarios de la prisión habían suspendido la ejecución después de que Lockett permaneciera consciente y sufriera convulsiones en la camilla. En sus primeras declaraciones públicas sobre la muerte de Lockett, el Presidente Obama calificó a la ejecución fallida como “muy preocupante” y afirmó que plantea “preguntas difíciles y profundas”.
Obama dijo: “En la aplicación de la pena de muerte en este país hemos visto problemas importantes: discriminación racial, aplicación desigual de la pena de muerte, situaciones donde había personas en el corredor de la muerte que más tarde se descubrió que eran inocentes por pruebas exculpatorias. Y creo que todo esto plantea cuestiones importantes sobre cómo se está aplicando la pena de muerte. Entonces, estaré hablando con Eric Holder y otros para realizar un análisis de qué medidas se han tomado, no sólo en este caso particular, sino en esta área en general. Creo que tenemos que, como sociedad, hacernos algunas preguntas difíciles y profundas en torno a estas cuestiones”.
La revisión del Departamento de Justicia se centrará estrictamente en el “protocolo federal” para realizar ejecuciones y no en las cuestiones de raza y condenas erróneas que Obama mencionó.
El viernes, un portavoz de Navi Pillay, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, dijo que la muerte de Lockett pudo haber violado el derecho internacional por “trato cruel, inhumano y degradante”. La ONU pidió a Estados Unidos que imponga una moratoria a nivel nacional sobre la pena capital y que trabaje “para la abolición de esta práctica cruel e inhumana”.
Ucrania ha sufrido la ola de violencia más mortífera en meses después de que el conflicto entre nacionalistas y las milicias pro-rusas se extendiera a la ciudad portuaria sureña de Odessa. Al menos 46 personas murieron el viernes cuando un gran incendio se desató en una base donde ambas partes estaban en lucha. El domingo, los separatistas pro-rusos atacaron una estación de policía de Odessa, liberando a decenas de presos. El gobierno de Ucrania se ha comprometido a intensificar su campaña contra los separatistas, mientras grandes partes de Ucrania parecen estar al borde de la guerra. En una medida que podría ayudar a reducir las tensiones entre las potencias extranjeras, siete supervisores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa fueron liberados el pasado sábado, tras más de una semana en cautiverio bajo las fuerzas pro-rusas.
Por otra parte, un periódico alemán informa que decenas de especialistas de inteligencia de Estados Unidos están asesorando al gobierno de Ucrania. Citando fuentes anónimas alemanas, Bild am Sonntag sostiene que los funcionarios de la CIA y el FBI están en Kiev brindando asesoramiento sobre cómo poner fin a la rebelión en el este y combatir el crimen organizado.
Se teme que hayan muerto miles de personas tras una avalancha en Afganistán. Una montaña en la provincia nororiental se derrumbó el pasado viernes, enterrando a la población que estaba debajo. Se confirmaron al menos 500 muertes y hay más de 2.000 personas desaparecidas. Fue uno de los peores desastres naturales de Afganistán en años.
Irak ha completado su mes más sangriento en lo que va del año. Naciones Unidas afirma que al menos 750 iraquíes murieron en abril, más de 600 de ellos civiles. Irak celebró elecciones parlamentarias en todo el país la semana pasada en medio de una calma relativa. Al menos 30 personas murieron debido a la violencia durante un período de 24 horas este fin de semana.
El Presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, dice que ha pedido ayuda internacional para la búsqueda de las 276 estudiantes secuestradas el pasado mes. Se sospecha que el grupo militante islámico Boko Haram secuestró a las chicas durante una incursión nocturna a su albergue del noreste. Jonathan y el Presidente Obama han hablado por teléfono para discutir la crisis y Nigeria ha hecho una solicitud a otras potencias mundiales. El pasado fin de semana Jonathan celebró su primera reunión con los principales grupos involucrados, incluyendo a los padres indignados, tras las críticas por la respuesta del gobierno, que fue catalogada como inadecuada. En una entrevista televisada con un grupo de periodistas, Jonathan prometió conseguir la liberación de las estudiantes.
El Presidente nigeriano dijo: “Prometemos que donde quiera que estén estas chicas, seguramente las rescataremos. Lo bueno que me deja algo contento, y creo que también a la mayoría de los nigerianos, es que no hay información que indique que cualquiera de ellas resultara herida. Me solidarizo y expreso mi empatía hacia padres y familiares y, por supuesto, los tutores de estas chicas. Todos somos padres y madres”.
También se realizaron manifestaciones en todo el mundo este fin de semana para pedir la liberación de las estudiantes. Un grupo de expatriados nigerianos encabezó una marcha el sábado en Washington, DC.
Oluwatosin Adegbola dijo: “Presión. Tenemos que seguir haciendo ruido y asegurándonos de que el gobierno nigeriano sepa que está siendo observado por todos, nadie puede simplemente quedarse de brazos cruzados mientras esto les sucede a sus hijos. Todo el mundo está mirando. Hagan algo”.
Edem Duke dijo: “El Presidente de la República Federal de Nigeria tiene el poder de todas las fuerzas armadas del país, tiene los recursos financieros a su disposición para hacer que las cosas sucedan, si realmente desea que las cosas sucedan. Así que no debería haber ninguna excusa”.
Hay informes sin verificar de que las chicas fueron vendidas, obligadas a casarse con sus secuestradores y llevadas por la frontera hacia Chad o Camerún. El día de hoy, una líder de las protestas de Nigeria para el regreso de las chicas acusó a la Primera Dama nigeriana, Patience Jonathan, de ordenar su arresto.
En Irlanda, la policía liberó al líder del Sinn Fein, Gerry Adams, tras haberlo interrogado durante cuatro días en relación a su presunta participación en un asesinato de 1972. Adams fue detenido la semana pasada en el marco de una investigación sobre la muerte de Jean McConville presuntamente a manos de integrantes del Ejército Republicano Irlandés (IRA, por su sigla en inglés). Madre de diez hijos, McConville fue en aquel momento acusada erróneamente de ser informante británica. Aparentemente, nueva evidencia que implica a Adams habría surgido de grabaciones realizadas en el marco de un proyecto de historia oral llevado a cabo por estudiantes del Boston College. En una conferencia de prensa que tuvo lugar tras su liberación, Adams proclamó su inocencia.
Gerry Adams expresó: “Soy inocente de toda participación en cualquier conspiración para secuestrar, matar o sepultar a la Sra. McConville. He trabajado arduamente junto a otras personas para que esta injusticia sea reparada y por el retorno de los cuerpos de otras personas asesinadas durante el conflicto y sepultadas en secreto por el IRA, y voy a seguir trabajando por ello”.
Adams ha enfrentado varias acusaciones de estar relacionado con los asesinatos políticos cometidos por el IRA, lo que ha negado por largo tiempo.
En Arkansas, un hombre armado mató a tres personas e hirió a otras cuatro antes de quitarse la vida. Entre las víctimas figuran una joven de doce años de edad que falleció y dos niños que resultaron heridos. El agresor, Porfirio Hernández, había sido dado de alta de una institución psiquiátrica pocos días antes.
El Presidente Obama recibió a la Canciller alemana Ángela Merkel en la Casa Blanca el viernes, al tiempo que continúan las divergencias en relación al espionaje llevado a cabo por la NSA. Las filtraciones del denunciante Edward Snowden demuestran que el teléfono celular de Merkel fue intervenido, además de que se espió a otros líderes alemanes. En una conferencia de prensa, Merkel sostuvo que se mantiene la distancia entre ambas partes y que es demasiado pronto para retornar a la manera “usual” de proceder. Obama reconoció que las revelaciones de Snowden habían sembrado tensión en las relaciones entre Estados Unidos y Alemania.
El Presidente Obama sostuvo: “Me duele ver el grado en el que las revelaciones de Snowden han generado tensiones en las relaciones. Pero durante mucho tiempo también estuve convencido de que es importante para nuestras estructuras legales y nuestras estructuras políticas estar al día con el rápido avance de las tecnologías. Estamos comprometidos con un diálogo cibernético entre Estados Unidos y Alemania para acortar aún más las distancias que existen en relación a la manera en que operamos, a la manera en que opera la inteligencia alemana, para garantizar así que haya transparencia y claridad respecto a lo que estamos haciendo, así como respecto a nuestros objetivos e intenciones”.
Las negociaciones entre Estados Unidos y Alemania se quebraron recientemente luego de que el gobierno de Obama se negara a un compromiso total de abstenerse de todo espionaje no autorizado en territorio alemán. En un gesto de aprobación a la Casa Blanca, el gobierno de Merkel aconsejó al Parlamento alemán que no invite a Snowden a dar testimonio en relación a las revelaciones sobre espionaje. Un informe del Ministerio del Exterior de Alemania advierte que la comparecencia de Snowden podría generar más tensión en las relaciones con Estados Unidos y que probablemente podría provocar que Estados Unidos presentara cargos contra legisladores alemanes por colaborar con Snowden en la difusión de información clasificada.
Hay nuevas especulaciones respecto a que el gobierno de Obama modificará su política de deportaciones a raíz de un comentario informal del Vicepresidente Joe Biden. En un discurso pronunciado en Miami el pasado sábado, Biden alentó a un grupo de estudiantes universitarios a desafiar la autoridad y las ortodoxias políticas. Al mencionar la lucha de los inmigrantes, un integrante del público aparentemente habría seguido el consejo de Biden y gritado solicitando al gobierno de Obama detener su récord de deportaciones de inmigrantes indocumentados. La respuesta de Biden hizo que algunos predigan que la Casa Blanca lo hará.
El Vicepresidente Joe Biden afirmó: “Está grabado en el ADN de Estados Unidos. Desde la escuela y en adelante, se nos alienta a desafiar los supuestos básicos. No se critica a ningún niño por desafiar la ortodoxia. Desde nuestros padres fundadores en adelante, así ha sido durante los pasados 200 años. La comunidad inmigrante representa algo especial de lo que nunca hablamos…”.
Un estudiante gritó: “¡Detengan las deportaciones!”.
Biden respondió: “También lo haremos, muchacho, pero déjame terminar mi discurso”.
El gobierno de Obama se encuentra en plena revisión de su política de deportaciones. La semana pasada, tres sheriffs de Colorado se unieron a una creciente lista de autoridades locales que ya no obedecerán automáticamente las solicitudes federales de mantener detenidos a inmigrantes indocumentados para su deportación.
Legisladores republicanos anunciaron una nueva investigación del Congreso en relación al mortal ataque contra un puesto diplomático estadounidense en Benghazi. El Líder de la Mayoría de la Cámara de Representantes, John Boehner, sostuvo que conformará una selecta comisión tras hacerse público un nuevo correo electrónico de la Casa Blanca en que se discute el discurso que adoptará el gobierno ante la opinión pública. El embajador de Estados Unidos Christopher Stevens y otros tres estadounidenses murieron en septiembre de 2012 cuando militantes atacaron su complejo. Los republicanos han acusado al gobierno de Obama de encubrir una falla en la seguridad, mientras que por su parte, los demócratas afirman que los republicanos exageran una cuestión que no existe.
La ex Secretaria de Estado Condoleezza Rice canceló una aparición pública en la Universidad Rutgers tras una ola de manifestaciones universitarias. Rice recibiría 35.000 dólares por pronunciar el discurso de graduación este mes. Sin embargo, los estudiantes de Rutgers ocuparon un edificio de la universidad y pidieron que se retirara la invitación a Rice por su participación en la guerra de Irak y la tortura llevada a cabo durante el gobierno de George W. Bush. En un comunicado, Rice expresó que su aparición “se convirtió en una distracción”.
Activistas se congregaron frente a la Casa Blanca el domingo para realizar la reconstrucción de una boda que fue atacada en Yemen por aviones no tripulados estadounidenses. Doce civiles murieron cuando una aeronave estadounidense bombardeó el cortejo de bodas el pasado mes de diciembre. Las muertes provocaron una prohibición a los ataques con aviones no tripulados del ejército estadounidense en Yemen, pero los mismos han continuado a cargo de la CIA.