Los ataques del viernes en París generaron una lluvia de pedidos de que se cierren las fronteras de Estados Unidos y se niegue el ingreso al país de refugiados que huyen de Siria. El presidente de la Cámara de Representantes Paul Ryan y el líder de la mayoría del Senado Mitch McConnell han solicitado que se “suspenda” el programa de Estados Unidos para aceptar a refugiados sirios, y los gobernadores de al menos 27 estados han dicho que no aceptarán refugiados. La Casa Blanca realizó una teleconferencia con 34 gobernadores el martes. El presidente Barack Obama sostuvo que los intentos de impedir el ingreso de refugiados son “ofensivos y contrarios a los valores estadounidenses”.
Obama declaró: “Estamos abiertos a escuchar ideas, pero eso no es lo que realmente ha estado sucediendo en el debate. Cuando los candidatos dicen que no deberíamos admitir a huérfanos de tres años de edad, eso es un posicionamiento político. Cuando se dice que deberíamos obligarlos a pasar exámenes de religión y que solamente se debería permitir el ingreso de aquellos que se compruebe que son cristianos es ofensivo y contrario a los valores estadounidenses”.
Para ver un reportaje sobre el posible cierre de la frontera de Estados Unidos a refugiados que huyen de Siria con Peter Bouckaer de Human Rights Watch y la congresista de California Barbara Lee visite nuestra página web democracynow.org/es
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