Las autoridades belgas arrestaron a dieciséis personas en una serie de redadas nocturnas, mientras los habitantes de la capital, Bruselas, siguen encerrados en sus casas. Bélgica impuso un estado de alerta máxima para Bruselas, mientras oficiales registran la ciudad en busca de Salah Abdeslam, uno de los principales sospechosos de los ataques de París. Se ordenó a los habitantes que se alejaran de las ventanas, se ha suspendido el transporte público y se han cerrado las escuelas y los museos. Un portavoz del fiscal federal de Bélgica dijo que Abdeslam no fue una de las personas arrestadas en las redadas de anoche.
Eric Van Der Sypt afirmó: “La oficina del fiscal federal y el juez de instrucción de Bruselas, que se especializan en casos de terrorismo, ordenaron el registro de diecinueve viviendas en la región de Bruselas. Hasta el momento, no se han encontrado armas de fuego ni explosivos. Salah Abdeslam no fue arrestado en las redadas”.