Egipto ha abierto un nuevo frente en la guerra contra el Estado Islámico. El lunes, aviones de combate egipcios bombardearon el noreste de Libia después de que El Cairo prometiera vengar el asesinato de 21 cristianos coptos, que fueron asesinados por ISIS como se vio en un video del grupo. Egipto afirma que atacó sitios de ISIS de forma “precisa”. Pero al menos siete civiles, entre ellos tres niños, habrían muerto en la ciudad costera de Derna. Por otra parte, el presidente egipcio Abdel Fattah el-Sisi solicitó una resolución de la ONU que ponga en marcha una coalición mundial para intervenir en Libia.
Abdel Fattah el-Sisi declaró: “Lo que está pasando en Libia podría convertir a este país en un caldo de cultivo que amenazará toda la región, no solamente a Egipto. Egipto, la cuenca mediterránea y Europa tienen que lidiar con este problema, ya que la misión no fue cumplida, quedó sin terminar por parte de nuestros amigos europeos. Abandonamos al pueblo libio como prisioneros de las milicias extremistas”.
Por su parte, el domingo y el lunes, la coalición liderada por Estados Unidos lanzó quince ataques aéreos contra ISIS en Irak y Siria.