Cientos de personas también se congregaron en la ciudad de Nueva York para exigir que Estados Unidos se comprometa a aceptar una cifra significativamente más alta de refugiados procedentes de Siria y otros países.
Linda Sarsour, directora ejecutiva de la Asociación Árabe Estadounidense de Nueva York, hizo la siguiente declaración: “No deberíamos preguntarnos si le damos la bienvenida a estas personas en nuestro país, deberíamos estar exigiéndole al gobierno de Estados Unidos, una de las superpotencias del mundo, tenemos suficientes recursos en este país, no solo para ayudar a los nuestros, a las personas sin hogar en las calles, sino también para dar la bienvenida al menos a 100.000 refugiados sirios. Y tenemos que poder decirle al gobierno de Estados Unidos cómo usar nuestro dinero. Yo prefiero usar mi dinero para albergar una familia siria, que para matar a una familia iraquí”.