En Israel, la reacción del primer ministro Benjamin Netanyahu ante el discurso de John Kerry fue rápida y severa.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo: “Pero ahora debo expresar mi gran desilusión con el discurso de hoy de John Kerry, un discurso casi tan desequilibrado como la resolución contra Israel que se aprobó la semana pasada en la ONU. […] Israel espera deseoso trabajar con el presidente electo Donald Trump y con el Congreso de Estados Unidos, tanto demócratas como republicanos, para mitigar el daño causado por esta resolución y poder derogarla”.
Por su parte, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, criticó el discurso de Kerry en su cuenta en Twitter, donde escribió dos tuiteos: “No podemos seguir dejando que Israel sea tratada con tanto desprecio y falta de respeto. [Éste país] solía tener un gran amigo en Estados Unidos, pero ya no. ¡El comienzo del fin fue el horrible acuerdo con Irán, y ahora esto [la ONU]! ¡Fuerza, Israel, el 20 de enero está cerca!”. En Washington, legisladores de ambos partidos criticaron el discurso de Kerry. El senador republicano por Carolina del Norte Lindsey Graham lo calificó de “delirante”, mientras que el senador demócrata por Nueva York Chuck Schumer dijo que Kerry había “alentado a los extremistas de ambos lados”.