En Hoboken, Nueva Jersey, al menos una persona murió y más de 100 resultaron heridas, varias de gravedad, después de que un tren de pasajeros se precipitara en una estación, chocando contra una pared, durante la mañana del jueves. Los testigos describieron una escena horrible, de cuerpos ensangrentados y metal retorcido. El testigo William Blane dijo que el choque del tren sonó como una bomba.
William Blane relató: “Corrí hacia afuera y cuando miré a la derecha, solo vi cuerpos. Vi escombros, hierro. Vi polvo en el cabello de un hombre que trataba de levantarse. Vi a otra persona sangrando, así que fui a ayudarla a salir, pero un par de personas llegaron primero a ayudarla. Así que seguí mirando y entonces fue cuando vi el tren en la pared. No lo podía creer”.
Las autoridades aún investigan por qué el tren de la empresa New Jersey Transit no pudo frenar cuando se aproximaba a la terminal de Hoboken, pero están considerando el desastre como un accidente. El tren no tenía un sistema de Control positivo, una tecnología que puede detener automáticamente los trenes en peligro de descarrilamiento o colisión. New Jersey Transit tendría que haber implementado esa tecnología a fines de 2015, en virtud de un mandato del Congreso aprobado en 2008, pero se le concedió una prórroga de tres años después de que la industria ferroviaria presionara con éxito para obtenerla.